El rincón de pensar es un método utilizado por algunos padres, madres y educadores. A través de esta experiencia, quieren ayudar al niño a que reflexione sobre un hecho determinado. Surgen muchas preguntas en torno a esta práctica, y en este artículo tienes la información esencial para comprender esta herramienta.
Esta práctica quizá sea positiva en algunos casos, pues este ejercicio brinda un tiempo al niño para que reflexione sobre un hecho en concreto que ha generado una consecuencia negativa.
Sin embargo, ten en cuenta que existen errores que pueden hacer sentir mal al peque. Cuando el niño es muy pequeño, todavía no tiene la capacidad de profundizar en su comportamiento. No está preparado para ello. Y, por este motivo, este medio carece de sentido en este contexto.
En ese caso, este tiempo en soledad puede confundirle todavía más. Del mismo modo, este método puede ofrecer un recurso puntual para utilizarlo en momentos concretos. Este es un medio con un fin educativo cuando se utiliza con esta perspectiva.
Pero, si esta experiencia se convierte en frecuente en la rutina familiar, deja de ser constructiva. Otro error que también produce malestar al peque es que el tiempo de reflexión se prolongue en exceso. Además, el niño no debe permanecer en un entorno cerrado o alejado.
El ejercicio de la empatía está muy presente en la educación. Por esta razón, esta comprensión debe expresarse en caso de aplicar esta medida. Sin embargo, este rincón, más allá de su intención positiva, plantea ciertas críticas negativas por parte de algunas personas.
En el fondo, esta es una forma de castigo. Es un castigo porque el niño lo percibe como tal. Y, por tanto, lo vive de este modo de principio a fin. Un castigo suele estar vinculado con el temor.
Y, a este respecto, quizá te hagas la siguiente pregunta: ¿Es positivo utilizar este método para que el niño se porte bien si, durante este proceso de reflexión, se siente mal por algún motivo?
Como adulto, tú también puedes reflexionar sobre cómo educar a tu hijo con una disciplina positiva. En ese caso, el lenguaje adquiere especial relevancia en este proceso de acompañamiento.
Existe un error que no debes cometer en tu comunicación con tu hijo. Es positivo que diferencies entre las acciones que ha realizado y su propia esencia. Un comportamiento inadecuado no justifica un mensaje del tipo: “Eres malo o mala”.
Esta afirmación da lugar a etiquetas que afectan de manera negativa a la autoestima del menor. Por tanto, este es uno de los mensajes que no debe utilizarse si se incorpora este método en la educación infantil.
Tu hijo necesita normas coherentes para crecer y vivir en un entorno feliz. Las dificultades pueden surgir de manera realista en la rutina diaria de la vida familiar. Y, en ocasiones, quien necesita un tiempo de reflexión y de calma eres tú.
Es decir, quizá seas tú quien quieras tener un espacio propio para pensar en un tema concreto de la vida familiar, mientras tu hijo está acompañado por tu pareja. Un espacio en el que escuchar tus emociones y observar una situación con más distancia. Tal vez en algún momento sientas que tu paciencia está a punto de agotarse, y necesitas recuperarte. De este modo, te sentirás más tranquilo para acompañar a tu hijo con inteligencia emocional y ayudarle a solucionar el conflicto.
Para saber si es útil el rincón de pensar, conviene atender a cada situación de forma individual. Sin embargo, también puedes buscar otras alternativas a esta práctica.
Fuentes de referencia:
https://www.supertics.com/blog/el-rincon-de-pensar
4 Alternativas al Rincón de Pensar
https://www.serpadres.es/3-6-anos/educacion-desarrollo/fotos/alternativas-respetuosas-al-rincon-de-pensar-241606834459
https://www.guiainfantil.com/articulos/educacion/castigo/cuando-el-nino-es-demasiado-pequeno-para-el-rincon-de-pensar/
https://madreshoy.com/la-silla-de-pensar-y-el-rincon-de-pensar/
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