Estas son las consecuencias de cuando los niños comen demasiado rápido

7 consejos para que el otoño no afecte a tu pizquito
23 septiembre, 2022
Consolar al bebé cuando llora en el coche
¿Conoces la frustración en niños? ¿Sabes manejarla?
13 octubre, 2022

Algunos padres se quejan de que en las comidas o en las cenas sus hijos tienen una ingesta rápida. Más allá de lo que comemos, también importa, y mucho, cómo lo hacemos. Hace años que los expertos en nutrición ya advierten de que comer de manera automática, mirando una pantalla, puede convertirse en un peligroso hábito para la salud. Pues bien, ahora se ha confirmado qué comer rápido se asocia a mayor riesgo de sobrepeso y otros factores cardiometabólicos en la infancia.

Además, se asocia la velocidad al comer en la infancia con el riesgo a desarrollar sobrepeso y otros factores de riesgo cardiometabólico, en estos casos el riesgo de presentar sobrepeso/obesidad es mayor, también estos niños presentan mayores niveles de tensión arterial y otros factores de riesgo cardiometabólico tales como el colesterol, los triglicéridos y la glucosa en ayunas.

Aquellos niños con mayor velocidad de ingesta presentan menor adherencia a la dieta mediterránea, un mayor riesgo de presentar sobrepeso/obesidad e incremento en los niveles de grasa corporal en un fututo, mayor tensión arterial y glucosa en sangre. Esto indica que el comer más rápido podría estar asociado con la ingesta de alimentos menos saludables como aquellos con mayor contenido energético, alimentos ultraprocesados asociados a un mayor riesgo de obesidad y alteraciones en el sistema cardiometabólico, los cuales pueden resultar más atractivos debido a su alta palatabilidad.

Otros estudios también han demostrado que masticar lentamente y aumentar el número de ciclos de masticación durante una comida se asocia inversamente con la adiposidad. Por lo tanto, estos resultados sugieren que una velocidad de ingesta más lenta podría mejorar el desarrollo de la señal de saciedad, lo que podría limitar la ingesta total de alimentos.

Canarias es el lugar con mayor índice de obesidad mórbida de toda Europa, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Recientes estudios han revelado que un 44,2% de niños canarios padece sobrepeso. La media con respecto a España está en un 26%. Según un informe elaborado por The Economist junto a expertos españoles, el porcentaje de obesos en los dos sexos ha crecido un 22% en la última década en el archipiélago. El informe revela un dato muy crítico, y es que una persona tiene hasta siete veces más posibilidades de morir de diabetes en Canarias que en Madrid.

En Canarias contamos con una media de 385 fallecidos al año (más de un muerto al día) por esta enfermedad entre 1981 y 2011, según datos de un estudio llamado DARIOS avalado por la Federación Internacional de Diabetes.

Por eso, crear hábitos familiares de alimentación adecuada y actividad física hace que sea más fácil para todos mantenerse en un peso saludable. Así, planear momentos del día que incluyan alguna actividad física en familia hace que todos potencien el apoyo y la motivación para crear rutinas deportivas. O también, añadir más frutas en las comidas de entre horas puede cambiar las costumbres de los miembros de la familia.