Todo padre sabe que acostar a los niños suele convertirse en una ardua y complicada tarea. En muchas ocasiones, los pequeños no quieren irse a la cama y nos resulta agotador convencerle, no sin pasar antes por el proceso de bañarse, lavarse los dientes y ponerse el pijama.
¿Quieres saber cuánto tiempo gastamos en estas tareas? Un reciente estudio ha revelado el tiempo exacto que empleamos los padres en acostar a sus hijos.
El estudio —dirigido por Firefly, una empresa de cepillos de dientes— desvela que los padres empleamos una media de 140 horas al año tratando de acostar a nuestros hijos, lo que equivaldría a 18 jornadas completas de trabajo.
A los padres normalmente nos cuesta 25 minutos conseguir que nuestros hijos se metan en la cama cada noche.
Para obtener estos resultados, Firefly estudió las rutinas de 1.000 padres con niños con edades comprendidas entre 3 y 12 años. La empresa concluyó que los padres normalmente tardan 25 minutos en lograr que sus hijos se metan en la cama cada noche, lo que equivale a 3 horas a la semana y, por tanto, 140 horas al año.
Puede que esta cifra parezca exagerada, pero es interesante observar que algunos expertos recomiendan que los padres pasen 30 minutos como mínimo preparando a los niños para irse a dormir, así, el niño tendrá suficiente tiempo para relajarse. No obstante, este tiempo no incluye la «batalla» cuando los niños se niegan a obedecer. Por consiguiente, un 77% de los padres y las madres aseguran que la rutina de acostar a sus hijos les deja completamente agotados.
Pero, ¿por qué se tarda tanto? De acuerdo con el estudio, la edad de los niños determina cuál va a ser el mayor problema. Los padres con niños de entre cinco y seis años, por ejemplo, encuentran más dificultades para conseguir que los niños se laven los dientes; mientras que a los padres con niños de entre siete y ocho años les cuesta más el propio hecho de meter a sus hijos en la cama.
Un 57% de los padres y un 63% de las madres admitieron tener problemas para acostar a sus hijos.
Curiosamente, el estudio reveló que también influye la persona que acuesta a los niños. Solo un 57% de los padres, frente a un 63% de las madres, admitió tener problemas para acostar a sus hijos.
Sin embargo, de esto no tiene por qué desprenderse que las madres son menos productivas. De acuerdo con el estudio, las madres tienen menos dificultades para bañar a sus hijos y ponerles el pijama. Completar estas tareas les lleva dos minutos menos que a los padres, quienes emplean una media de 17 minutos.
Las dificultad de meter a los niños en la cama puede deberse a que estos tienen la sensación de estar perdiéndose algo, así que puede resultarles más divertido complementar esta rutina con juegos en el baño, pijamas o pasta de dientes de colores e historias para dormir.
Fuente: huffingtonpost.es