Las actividades con pintura para niños siempre nos resultan muy placenteras. Más aún, cuando descubrimos que podemos utilizar casi cualquier cosa para pintar.
Hoy recurrimos a objetos redondos (globos, pompones, pelotas, etc.) para crear estampaciones libres por el papel. De esta forma, además de practicar la motricidad fina a la hora de sostener los materiales, aprendemos a regular la presión que ejercemos para tomar y depositar pintura, comparamos el tamaño de los elementos y la facilidad o dificultad que supone manejarlos, observamos como van apareciendo y mezclándose las manchas de color, controlamos el rebote de globos o pelotas para que no se escapen, entre otros aspectos.
Ha sido una experiencia fabulosa y divertida con la que hemos podido comprobar que la imaginación y la expresión artística no tienen límites.
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